- Introducción
- Anatomía de la piel
- Los poros
- Filamentos sebáceos
- Cómo lavar el rostro
- Cómo mantener el poro limpio
- Productos faciales
- Manto ácido de la piel
- La importancia de la limpieza de las herramientas
- Orden de los productos que nos aplicamos
- Puntos negros
Introducción
Tenemos conocimiento de que existen muchas técnicas para el lavado del rostro y en general la piel, sin embargo, siempre recomiendo que no sea frotándola ya que puede ser muy dañino para nuestra belleza generando arrugas prematuras y minando nuestra autoestima.
Lo primero que vamos a ver en este tema será la anatomía de la piel, ya que el entender cómo funciona es básico para un mejor trato al cutis. Es importante comprender la estructura de la epidermis, la dermis y la hipodermis, para comprender como es la mejor forma de lavarse el rostro sin dañar, tú misma vas a sacar conclusiones de lo que se debe y no hacer, por tanto, la mejor herramienta que tenemos será la información.
La piel requiere de cuidados muy exhaustivos para no dañarla y no tener arrugas a una temprana edad, así como otros problemas dermatológicos, por ello vamos a analizar la piel. Sabemos perfectamente que ella tiene varias funciones, entre ellas:
1.- Regula la temperatura del cuerpo.
2.- Almacena agua y grasa.
3.- Es un órgano sensorial.
4.- Impide la pérdida del agua.
5.- Evita que las bacterias ingresen al organismo.
6.- Es una barrera entre los órganos internos y el exterior.
7.- En todo el cuerpo tiende a variar sus características entre ellas se encuentra el grosor, el color, y su textura.
Anatomía de la piel.
La piel tiene tres capas las cuales se diferencian, pero en cada una tiene características específicas:
1.-Epidermis
2.- Dermis
3.- Hipodermis o tejido subcutáneo
También tienen estructuras como el cabello, pelo, glándulas sebáceas, glándulas sudoríparas, etcétera.
1.- En la hipodermis o tejido subcutáneo (debajo de la piel), en esa parte de piel se encuentran las células adiposas (grasa) y consiste principalmente en tejido conjuntivo y lóbulos de grasa, también contiene vasos sanguíneos y nervios de un tamaño mayor que los que se encuentran localizados en la dermis. La función de la hipodermis es la de un aislante y también la de proporcionar un aislamiento energético. Además, la hipodermis es crucial en la regulación de la temperatura corporal, ya que ayuda a conservar el calor del cuerpo en climas fríos y a disipar el calor en climas cálidos. Por otra parte, actúa como amortiguador, protegiendo los órganos internos de impactos y lesiones. Esta capa de tejido también juega un papel importante en la apariencia estética y el contorno del cuerpo, ya que es responsable de la elasticidad y firmeza de la piel.
2.- La dermis a comparación con la epidermis, la dermis es una red compleja que tiene elementos celulares y acelulares; elementos celulares son las procariotas y las eucariotas; las células eucariotas tienen un núcleo y orgánulos envueltos por una membrana, mientras las procariotas carecen de estos elementos. El término acelular se refiere a sin células y por lo tanto a los microorganismos no celulares como a los tejidos sin células.
En la dermis se tiene vasos sanguíneos, nervios, raíces capilares y glándulas sudoríparas. De manera estructural, la dermis consiste en dos subcapas; la dermis papilar superficial y la dermis reticular que es más profunda. Los bucles vasculares de la dermis papilar aportan nutrientes y oxígenos a la epidermis, mientras que el colágeno que se localiza básicamente en la dermis reticular es la proteína estructural más importante de la dermis aportando a la piel su durabilidad. La elastina, una proteína que se considera de las más importantes de la dermis, es la que aporta a la piel su elasticidad.
Los fibroblastos, conocidos por su papel crucial en la dermis, son células especializadas que desempeñan un papel vital en la síntesis y degradación de las proteínas dérmicas, como el colágeno y la elastina, manteniendo así la integridad estructural de la piel. Además de los fibroblastos, la dermis alberga otras células importantes para el funcionamiento óptimo de la piel, como los macrófagos y los linfocitos. Estas células juegan un papel clave en la respuesta inmune de la piel, protegiendo el cuerpo contra agentes patógenos y contribuyendo a la salud general de este órgano vital.
3.- Epidermis, es un epitelio (tejido animal que reviste la superficie, cavidades y conductos del organismo) pavimentoso córneo multiestratificado (dispone de diferentes partes en capas paralelas, es decir, una sobre otra) que normalmente tiene entre 0,03 mm y 0,05 mm de grosor y consta principalmente de queratinocitos en fases progresivas de diferenciación desde las capas más profundas a las capas más superficiales.
A medida que se dividen los queratinocitos (son células que producen queratina y además citocinas las cuales son moléculas solubles con funciones de regulación de las células epiteliales y células dérmicas) que se mueven de la capa más profunda a las capas más superficiales, comienza un proceso fascinante en el que estas células experimentan cambios en su morfología y composición molecular para formar la barrera protectora de la piel. Una vez que se encuentran en la capa córnea (la capa externa), se desprenden en el proceso de recambio epidérmico, un ejemplo de ello es al rascarse o al bañarse, lo que produce ese desprendimiento. Este proceso se denomina descamación, la cual es esencial para mantener la salud y vitalidad de la piel. La descamación es un proceso natural e importante, ya que permite eliminar las células muertas de la superficie de la piel, promoviendo así la regeneración de la piel. Este recambio epidérmico completo, también conocido como la renovación de la piel, es un proceso continuo que tarda aproximadamente 2 meses en su totalidad, asegurando que la piel se mantenga en constante renovación y óptimas condiciones.
Los Poros.
La función que cumplen los poros es el drenar los conductos de las glándulas sebáceas y sudoríparas. Las glándulas sudoríparas ecrinas se encuentran en la mayor parte del cuerpo y se abren directamente sobre la superficie de la piel. Las glándulas apocrinas en lugar de ir directo a la superficie éstos se desarrollan en los folículos capilares que se extienden hasta la superficie, como en el cuero cabelludo, axilas y la ingle. Las glándulas sudoríparas ecrinas están implicadas en la sudoración excesiva, también las glándulas apocrinas pueden desempeñar un papel importante en este proceso.
Las glándulas sudoríparas ecrinas se encuentran en la mayor parte del cuerpo y se abren directamente sobre la superficie de la piel. Las glándulas apocrinas desembocan en los folículos capilares que se extienden hasta la superficie de la piel. Las glándulas apocrinas se desarrollan en áreas con muchos folículos capilares, como en el cuero cabelludo, las axilas y la ingle. Las glándulas sudoríparas ecrinas están implicadas en la sudoración excesiva.
Las glándulas ecrinas y apocrinas se encuentran en la piel y desempeñan funciones importantes en el cuerpo humano. Las glándulas ecrinas se distribuyen ampliamente por todo el cuerpo y liberan un fluido transparente que ayuda a regular la temperatura corporal a través de la evaporación. Por otro lado, las glándulas apocrinas se localizan especialmente en las axilas y la zona genital, y su secreción está influenciada por factores hormonales y nerviosos. Estas glándulas producen un líquido más espeso que, al descomponerse en la superficie de la piel, puede causar olor corporal. Ambos tipos de glándulas son parte fundamental del sistema de regulación térmica y desintoxicación del organismo.
Filamentos sebáceos.
Filamento (es un cuerpo filiforme -forma o apariencia de hilo- flexible o rígido) por lo que en este caso los filamentos sebáceos tienen forma de hilo graso flexible o rígido que aparecen y de color negro, sin embargo, no son igual a los puntos negros ya que las características que presentan son otros. A diferencia de los puntos negros los filamentos son naturales e indispensables en nuestra vida, pero los puntos negros no.
Los filamentos sebáceos siempre mueven la grasa hacia la superficie mientras que los puntos negros siempre obstruyen por completo el poro. Por lo que los filamentos sebáceos son básicamente hebras de aceite y células muertas que al trasladar el aceite hacia la superficie de la piel la mantiene hidratada y protegida con elasticidad y textura. Aunque tienen un color, ya sea blanquecino o amarillo tienden a confundirse con comedones de punto negro o blanco. El lugar donde se aparecen típicamente es en la zona «T» frente, barbilla y nariz especialmente en personas con tendencia a piel grasa.
Como se puede observar son parte estructural de nuestra piel por lo que sin ellos simplemente no habría funciones específicas de la piel de esta manera no nos podemos deshacer de ellos, pero sí que se les puede dar tratamiento específico para mantenerlos limpios y bellos.
Cómo lavar el rostro.
Pero ¿Por qué te digo todo lo anterior? Bien, es para comprender cómo se comporta la piel, de esta manera podemos entenderla mejor y conocer lo que es dañino para ella y lo que no; por lo que para nosotros tiene mucha importancia el dejar claro que no se debe frotar, tallar, y todos los sinónimos que existen, y es porque cuando nos lavamos el rostro y/o el cuerpo tendemos a tallar ya que sentimos esa necesidad para creer que estamos sacando la suciedad, sin embargo, aunque sea de manera delicada la podemos dañar y lejos de limpiar a profundidad lo único que lograremos será un cutis con arrugas prematuras y muchas de ellas sino es que todas son ocasionadas por nosotras mismas, es por esa razón en mi insistencia de no frotar la piel. Hay muchas técnicas que existen para el lavado del rostro, sin embargo, siempre voy a recomendar que sea a pequeños toquecitos y con calor.
Como se puede observar, el proceso de limpieza facial requiere de ciertos pasos para asegurar una limpieza profunda y efectiva sin frotar. Al aplicar calor y colocar el producto en la piel, se logra ablandar la suciedad que obstruye los poros, permitiendo que el producto penetre mejor. Es importante mencionar que una técnica recomendada es frotar el producto en las manos y luego aplicarlo a la piel con toquecitos suaves y apretando un poco, asegurándose de que el producto penetre correctamente para lograr el efecto deseado. Además, para complementar este proceso, se sugiere el uso de espátulas sónicas especializadas que ayudan a liberar los poros obstruidos, maximizando así la efectividad de la limpieza facial. Estas herramientas son auxiliares fundamentales para garantizar una piel limpia y saludable, libre de impurezas que pueden causar problemas dermatológicos. No importa el tipo de cutis que se posea, se tiene que lavar una vez en la mañana y una en la noche sin excederse y sin importar lo cansada que te encuentres, con los productos correctos, pero, sobre todo dándole el tiempo de limpieza que necesite para realizarse de lo contrario siempre tendrás un cutis triste y opaco
Lo primero a realizar será utilizar el desmaquillante, recuerda que debe ser de calidad y especial para tu tipo de piel ya que algunos tienen en sus ingredientes aceites y puede ser que a tu piel no le ayude mucho o viceversa, todo esto es para que sea más efectiva la limpieza de los poros sin importar que te encuentres maquillada o no, aplicar como se indica y recuerda pasar por el rostro y cuello dando toquecitos (presionando) para que el producto penetre y empiece a desprender la suciedad y maquillaje que se encuentra atrapado en los poros recuerda aplicar calor ya sea con una toalla y agua caliente sin quemar o agua caliente sola o vapor. Posteriormente el limpiador facial que sea el correcto a tus necesidades de piel y aclarar con agua tibia. Por último, aplicar agua fría para calmar la piel y al finalizar el tratamiento que siempre se realiza para los diversos tipos de piel ya sean con cremas, sérum, geles, tónicos, aguas termales, exfoliantes que no contienen microcápsulas, ácidos, etcétera.
¿Cómo mantener el poro limpio?
El cuidado adecuado de la piel es crucial para mantener los poros limpios y evitar que se obstruyan. Cuando los poros se obstruyen, tienden a dilatarse y parecer más grandes de lo que realmente son. Es importante realizar una limpieza profunda para eliminar la suciedad, el exceso de grasa y las células muertas que pueden obstruir los poros. El calor facilita este proceso lo que hace es ablandar la suciedad y las células muertas que ya entraron en el poro, lo que permite una limpieza más efectiva. Al mantener los poros limpios y sin obstrucciones se favorece la penetración adecuada de los productos de cuidado de la piel, lo que maximiza sus beneficios. Para finalizar se aplica agua fría ya que esta acción la calma, pero cuidado que no sea extremadamente fría para no irritarla. Se puede aplicar agua caliente pero no demasiado caliente y vapor, recuerda que no se debe exponer al vapor arriba de 5 a 10 minutos. Siempre es importante realizar faciales y limpieza profunda con dermatólogos incluso de ser necesario utilizará tanto medicamentos como productos y todo lo que la piel requiera. Cuida que las exfoliaciones no tengan microcápsulas y que necesite de ser frotado, los productos están especialmente diseñados y tienen todos los ingredientes para penetrar y hacer su trabajo sin dañar.
Productos faciales.
Todos tenemos conocimiento de la multiplicidad de productos que existen para mantener el cutis lindo, aportarle brillo, elasticidad, lozanía, y un largo etcétera y para ello necesitamos darle a la piel tanto el tiempo como los productos idóneos. Es fundamental dedicar tiempo a establecer una rutina de cuidado facial que se adapte a las necesidades específicas de nuestra piel ya sea seca, mixta o grasa; entre todos estos productos se encuentran:
Aceites limpiadores.
- Limpiadores faciales buscar para cada tipo de pieles, neutra, mixta, grasa, seca, sensible
- Cremas hidratantes
- Desmaquillantes
- Leches
- Sérum
- Cremas bb
- Cremas cc
- Mascarillas
- Exfoliantes
- Cremas aclarantes
- Cremas para ojos
- Cremas reparadoras
- Geles
- Protectores solares
- Ácidos AHA, BHA y PHA que son exfoliantes pero que actúan de manera un poco más profunda, algunos más que otros ¡Cuidado con su manejo!
- Etcétera…
Los ingredientes de todos y cada uno de estos productos, tales como cremas faciales, sueros o tratamientos, tienen la capacidad de penetrar la piel de diferente manera unas más profunda que otros, dependiendo de su composición y tamaño molecular. Sin embargo, independientemente de su penetración, es fundamental que los poros no se encuentren obstruidos, como se ha hecho mucho énfasis anteriormente para permitir que los productos sean absorbidos de manera efectiva. La penetración de los ingredientes a través de la epidermis puede influir en la eficacia de los productos y en los resultados que se obtienen. Los productos a aplicar van a ir con relación al tipo de piel, algunos serán más astringentes que otros para pieles grasas o que contengan moléculas mayormente hidratantes para pieles secas, pero sin duda el análisis exhaustivo de nuestra piel es el origen de todo para incorporar productos adecuados y que se tenga éxito en el tratamiento.
Manto Ácido de la piel.
El manto ácido de la piel es una ligera capa suave aceitosa que se encuentra en el rostro y que cumple un papel crucial en la protección contra agentes externos. Esta capa protectora, compuesta principalmente de agua, lípidos y células queratinizadas, actúa como una barrera natural que ayuda a mantener el equilibrio del pH de la piel y a prevenir la proliferación de bacterias y hongos. Además, el manto ácido también contribuye a la retención de la humedad, manteniendo la piel hidratada y suave. Es importante cuidar esta capa para preservar la salud y la belleza de la piel facial.
Se siente como un medio acuoso de nuestra barrera hidrolipídica que proporciona a la piel sana su pH que es ligeramente ácido, entre 5,4 y 5,9. Esta capa protectora natural actúa como una defensa contra bacterias, virus y otros agentes externos dañinos, mientras mantiene la hidratación necesaria para la elasticidad y suavidad de la piel. El equilibrio de este manto ácido es esencial para prevenir la resequedad, irritación y el deterioro prematuro de la piel, por lo que su cuidado y protección son fundamentales para una piel sana y radiante. El manto ácido contribuye a la formación de lípidos esenciales como las ceramidas, ácidos grasos libres y colesterol, los cuales su función es proteger la piel de una deshidratación por lo que mantienen unidas las células de nuestra capa córnea exterior. También activa las enzimas que impulsan el proceso de descamación de las células de la capa córnea exterior lo que permite la regeneración de la piel tan necesario ya que de no ser así nuestro rostro se encontraría tan gruesa y se vería como cartón, a parte recordemos que a partir de los 30 años el ritmo de renovación se vuelve más lento por lo que es necesario ayudarle con diversos ácidos comerciales que existen en la industria como los AHA, BHA y PHA, y que no requieren de ser aplicados por un dermatólogo por lo que son muy recomendados. De igual manera el manto tiene la capacidad de repararse así misma al momento de encontrarse dañada, así como ser el lugar donde viven múltiples microorganismos que tienen muchos beneficios a nuestra piel por lo que contribuyen a la destrucción de microorganismos que son nocivos para nuestra salud.
fhttps://bellezamicron.com/2020/11/25/rutina-diaria-que-te-ayuda-a-una-linda-piel/
La importancia de la limpieza de las herramientas.
La limpieza en todas las herramientas que utilizamos son otro factor fundamental para evitar suciedad en los poros, las brochas, esponjas, toallas faciales, manos, en fin; todo, absolutamente todo lo que toque tu piel tiene que estar exageradamente limpio. En ocasiones una solución muy viable es utilizar utensilios desechables los cuales son muy prácticos al momento de realizar tanto el maquillaje como el aseo en el rostro. Además, es importante recordar que la limpieza regular de estos accesorios no solo contribuye a una apariencia impecable, sino que también ayuda a mantener la piel sana al prevenir la acumulación de bacterias y residuos, lo que a su vez puede ayudar a prevenir brotes de acné y otros problemas cutáneos. Por lo tanto, incorporar rutinas de limpieza y desinfección meticulosas para tus herramientas de maquillaje y cuidado de la piel es crucial para garantizar resultados óptimos y mantener la salud de tu cutis a largo plazo.
Orden de los productos.
- Desmaquillante
- Limpiador
- Exfoliante
- Tónico
- Esencia
- Suero
- Mascarilla
- Crema de ojos
- Hidratante
- Bálsamo de labios
- Protector solar
- Agua termal
Todo esto va en función del tipo de cutis que se posee, si es mixta, grasa, seca o sensible. En el caso de tener una piel mixta, es importante elegir productos que equilibren las zonas grasas y secas. Para pieles grasas, se recomiendan productos con compuestos que controlen el exceso de brillo y ayuden a reducir la producción de sebo. Para pieles secas, es crucial optar por productos que proporcionen una hidratación profunda y duradera. Por otro lado, las pieles sensibles requieren productos con ingredientes suaves y sin fragancias que puedan irritar la piel. En resumen, siempre se elegirán productos con compuestos apropiados a cada tipo de piel, asegurando así un cuidado personalizado y efectivo.
Palabras al lector.
La limpieza de la piel es una parte esencial de cualquier rutina de cuidado facial. Aunque puede parecer que toma mucho tiempo, los beneficios a largo plazo valen la pena. Un cutis limpio y terso no solo te hace lucir más joven, sino que también es la base perfecta para aplicar maquillaje. Además, una piel limpia y lisa sin manchas ni arrugas transmite una sensación de cuidado personal y autoestima, así como status. Es importante dedicar el tiempo necesario para utilizar los productos adecuados y proporcionar a nuestra piel el trato que merece. Al hacerlo, te aseguras de lucir bella y radiante en todo momento. Los resultados de ninguna manera son inmediatos, pero créeme que la constancia es la base de cualquier logro, no te desesperes y que nunca te falte un día y ni una noche de tu rutina facial.
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Belleza Micrón. 